25 años sin Fórmula 1 en la Argentina: por qué hoy es imposible la vuelta y cómo cambió el negocio que pone en jaque a los circuitos históricos

Las razones de la pérdida de la fecha en Buenos Aires. Cuánto cuesta una carrera en Europa y Sudamérica. Los nuevos mercados asiáticos, los “petrodólares”, el “efecto Netflix” y la vuelta con todo de Norteamérica

Este miércoles se cumplieron 25 años del último Gran Premio de la República Argentina de Fórmula 1. Es la ausencia más larga de la historia luego de los dos intervalos anteriores entre 1960 y 1972 y 1981 y 1995. Hoy, salvo cambios radicales, es una utopía poder recuperar la fecha por el delicado contexto económico del país para poder solventar un evento en cientos de millones de dólares para una inversión inicial. Pero también cambió el contexto mundial por los mercados emergentes que marginaron a sedes clásicas y pusieron en jaque a otras. El peso de la historia quedó al margen por los “petrodólares” y la influencia norteamericana de los nuevos dueños de la Máxima.

Nuevo mercado global.

En el tercer milenio las reglas del juego cambiaron y las sumas faraónicas hicieron añicos la tradición. Salvo Japón, que retornó en 1987, la irrupción de otros escenarios asiáticos como Malasia (tomó la fecha de Argentina en 1999)ChinaCorea del Sur e India en la década pasada comenzaron a complicar a los escenarios europeos. Si bien ésas tres no continúan (China por los inconvenientes de la pandemia de COVID-19), el ingreso con todo de Medio Oriente cambió el paradigma. Bahréin, pionero en 2004, ya no está solo y se sumaron para quedarse Singapur (2008), Abu Dhabi (2009), Qatar (2020) y Arabia Saudita (2021) en el calendario.

En la actualidad un “fee” o un canon anual para una carrera en Europa oscila los 25 millones de dólares por año en un contrato mínimo por cinco años. Este monto es superior para los mercados de Medio Oriente, que no obstante pagan ese extra gracias a sus “petrodólares”. Por caso, Arabia Saudita, que también habría cerrado la llegada del Rally Dakar por 75 millones de dólares por cinco años (2020-2024) y renovaría a partir de 2025, habría puesto una suma similar para ingresar en el calendario de F1 y armó un circuito callejero en Yeda por 200 millones de dólaresHabrían gastado 500 millones de dólares en un proyecto de cinco de años.

Esto atenta contra sedes emblemáticas como Spa-Francorchamps, que para este año estuvo en duda pese a tener el apoyo de todas las escuderías y de los pilotos por lo que significa. El mítico trazado belga de siete kilómetros logró una renovación excepcional por un año y aseguró su carrera para 2023. Es esa clase de autódromo que conserva el encanto de los inicios de la F1, como Monza, en Italia, que se aseguró la F1 hasta 2025. Otros, como Hockenheim, en Alemania, está ausente desde 2020 y en la tierra de Michael Schumacher Sebastian Vettel no están dispuestos a pagar más para tener el evento. O Francia, la sede de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), no estuvo por nueve años y volvió en 2018.

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