La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, no se reunirá con los participantes de la “fila del hambre”, término utilizado por los organizadores de la manifestación, que se encuentran cerca de su oficina en Carlos Pellegrini y Juncal. Debido a compromisos previos en la Zona Oeste, la funcionaria visita varios comedores, incluyendo los de José C. Paz, para supervisar la distribución de la asistencia y auditar la entrega de alimentos por parte del gobierno de Alberto Fernández a las organizaciones sociales y piqueteras. Desde Capital Humano denuncian que el 80% de estas organizaciones no rendía cuentas sobre la asistencia alimentaria recibida.
La “fila del hambre”, compuesta por dirigentes y asistentes a comedores y merenderos de movimientos sociales como UTEP, Movimiento Evita, Somos/Barrios de Pie, MTE y CCC, se ha extendido a lo largo de la mañana. La Policía de la Ciudad supervisa el cumplimiento del “protocolo antipiquetes”, mientras la Policía Federal resguarda el edificio de Moreno y 9 de Julio.
En un comunicado en redes sociales, el Ministerio de Capital Humano informa que los comedores deben solicitar fondos a través de canales oficiales cumpliendo los requisitos establecidos. Anteriormente, manifestantes habían reclamado por las “ollas vacías”, y la ministra había propuesto anotarlos personalmente para la entrega de alimentos sin intermediarios, propuesta que fue rechazada.
El gobierno de La Libertad Avanza, a cargo de Pettovello, decide entregar directamente el dinero para la compra de alimentos a los comedores, evitando la intermediación de las organizaciones sociales. Se duplica el monto de la Tarjeta Alimentar y se aumentan las transferencias de dinero a los comedores, pero los dirigentes sociales sostienen que los alimentos no llegan y acusan al gobierno de reducir la entrega de alimentos y asistencia social.
La ministra no recibirá a los manifestantes y desde el gobierno aseguran que no se dejarán extorsionar. Se destaca que, según registros oficiales, el 80% de las organizaciones sociales no rendía cuentas sobre la asistencia alimentaria recibida en los últimos cuatro años.
La jornada de protesta se extiende a nivel nacional, y los dirigentes de UTEP y otros movimientos sociales sostienen que continuarán esperando en la “fila del hambre” hasta obtener respuestas a la urgencia alimentaria. La tensión entre las organizaciones sociales y el gobierno de La Libertad Avanza se incrementa.
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