Milei es querellante en el caso de espionaje ilegal que involucra a jueces y políticos.

A tan solo 10 días de la segunda vuelta electoral, Javier Milei ha tomado la decisión de convertirse en demandante en el caso de espionaje ilegal a jueces, un asunto que está sacudiendo el escenario político en medio de la campaña electoral. Esto ha generado preocupación en su rival, Sergio Massa, ya que el caso involucra a uno de los diputados nacionales del partido oficialista, el kirchnerista Rodolfo Tailhade.

La presentación ante la justicia se llevó a cabo la noche anterior por parte de los abogados de Milei. En este proceso legal, también se incluyó una solicitud en nombre de Carolina Píparo, quien es diputada nacional y fue candidata a gobernadora en la provincia de Buenos Aires. Se sospecha que Píparo también fue objeto de investigaciones ilegales. El texto presentado establece que se busca promover una querella criminal contra Ariel Zanchetta y cualquier otra persona que pudiera estar involucrada como cómplice, encubridor o instigador, y se solicita que se le designe como parte demandante en el procedimiento.

La razón por la que Milei está interesado en este caso es que su nombre figura en la lista de personas espiadas, según lo informado por fuentes oficiales del sector de derecha. La decisión de permitir o no su participación en la investigación sobre el espionaje a jueces y funcionarios de la Corte Suprema, así como a los tribunales de Comodoro Py y otras figuras públicas, recae ahora en el juez federal Marcelo Martínez De Giorgi, quien está a cargo del caso. En caso de ser aceptado, Milei tendría la autorización legal para intervenir en el proceso y, lo que es más importante, para mantenerse informado sobre los acontecimientos a través de sus abogados: Francisco Oneto, Diego Spagnuolo y Roberto Rallin, quienes suscribieron el documento presentado ante el juez.

Carolina Píparo comentó después de la presentación que resulta irónico que aquellos que abogan por la democratización y el fin de prácticas poco éticas en la democracia sean precisamente quienes más recurren a los servicios de inteligencia para espiar tanto a sus opositores como a sus propios colegas. El líder de los libertarios, Milei, había realizado previamente declaraciones limitadas ante los medios de comunicación, sugiriendo que estaba siguiendo el caso. Señaló que, si la situación es tan grave como se sugiere, estaríamos enfrentando un asunto institucional grave y complicado. Además, Milei es diputado, y el mismo día de su intervención, los líderes de los bloques en la Cámara baja acordaron suspender las sesiones programadas para el día siguiente y se pospuso el funcionamiento de la comisión de Juicio Político por la misma razón.

La líder de PRO, Patricia Bullrich, quien se alió con Milei después de las elecciones generales para asegurar el respaldo de sus votantes en la segunda vuelta, adoptó un tono más crítico hacia el Gobierno y censuró a Sergio Massa. Massa se desvinculó del caso y se presentó como víctima de las maniobras investigadas, principalmente debido a que su nombre aparece en la misma lista que Milei, junto con otros cientos de figuras públicas, incluyendo a su esposa, Malena Galmarini, quien es la titular de Aysa.

Recientemente, Rodolfo Tailhade reconoció la autenticidad de los diálogos con el espía Zanchetta a través de la aplicación de chat Telegram, aunque negó haber participado en actividades ilegales de inteligencia. El ex policía está bajo detención y enfrenta acusaciones de formar parte de una red de espionaje no oficial. Las investigaciones judiciales revelaron que el ex oficial tenía como objetivos a varios individuos, incluyendo jueces, políticos, empresarios y periodistas, y mantenía archivos sobre diversos temas, incluida la muerte del fiscal Alberto Nisman.

Los investigadores también señalaron que Zanchetta, quien se presentaba como periodista y estaba al frente del sitio Enclave, financiado con fondos estatales, mantenía conversaciones con Tailhade y con el funcionario de la AFIP, Fabián “Conu” Rodríguez, miembro de La Cámpora. Rodríguez fue allanado después de recuperar mensajes eliminados del celular de Zanchetta. Esto ha llevado a la oposición a sospechar que el ex policía trabajaba por encargo del kirchnerismo, aunque el diputado K negó cualquier relación más allá de recibir comunicaciones de Zanchetta.

El informe también menciona a varios blancos políticos, incluyendo a Milei, Píparo y Massa, así como al presidente Alberto Fernández, a Patricia Bullrich y al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, entre otros. Además, se incluyen gobernadores como Axel Kicillof, Gustavo Bordet, Gerardo Morales, Rodolfo Suárez, Gerardo Zamora, José Alperovich, Jorge Capitanich y Gustavo Valdés, así como ex gobernadores como Antonio Bonfatti y Juan Manuel Urtubey, entre otros.