Patricia Bullrich retó a Javier Milei con estas palabras: “Si está dispuesto a debatir, que lo haga conmigo”

Ante las acusaciones de Javier Milei, quien alegó que Patricia Bullrich y su esposo, Guillermo Yanco, llevaron a cabo maniobras para perjudicar su imagen, la candidata presidencial de Juntos por el Cambio respondió en una entrevista con LN+. Bullrich defendió a su marido, quien ocupa el cargo de vicepresidente del Museo del Holocausto, y desafió a Milei a dirigir sus críticas hacia ella en lugar de su esposo, alegando que este último no se involucra en asuntos políticos ni en operaciones.

“Si Milei desea debatir, que lo haga conmigo. Soy la candidata a presidenta. Que no se inmiscuya con mi esposo, quien no está vinculado a la AMIA ni realiza operaciones políticas. Es conocido por su amabilidad y buenos modales, sin recurrir a insultos”, afirmó Bullrich. Además, instó a Milei a enfrentarla directamente en lugar de dirigir sus comentarios hacia su marido.

Bullrich, que compite contra Milei en las elecciones generales de octubre, también se refirió a su relación con el economista libertario. Afirmó que mantiene sus opiniones sobre él, reconociendo sus contribuciones, aunque no siempre estén de acuerdo en todo. Ella enfatizó que no ha cambiado su opinión, a diferencia de Milei, y le pidió que explique su cambio de enfoque.

En medio de este cruce de declaraciones, Milei rechazó cualquier posibilidad de un acuerdo con Bullrich y la acusó de regresar a su pasado de militante montonera. Alegó que ella copió algunas de sus ideas y expresiones en su discurso, y criticó sus posturas en términos económicos, afirmando que Bullrich ha adoptado un enfoque más socialista en ciertos aspectos.

En respuesta a estas acusaciones, Bullrich habló sobre su enfoque ético en relación con los salarios de los funcionarios públicos y cómo estos deberían reflejar la importancia de sus responsabilidades. Argumentó que la duplicación del Estado ha llevado a la precarización de los salarios en áreas cruciales, y defendió la necesidad de un salario adecuado para aquellos que tienen un rol social fundamental en la comunidad.