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A pesar de jugar con dos jugadores menos, San Lorenzo mantuvo su racha invicta al empatar 1-1 el lunes contra Unión en Santa Fe, en el partido de clausura de la tercera jornada de la Copa de la Liga. En la primera mitad, Adam Bareiro anotó para el equipo dirigido por Rubén Insúa, pero Gonzalo Morales igualó para Unión en la segunda mitad. Ambos equipos quedaron con 7 puntos en el Grupo 2.
Desde el inicio del partido, el equipo dirigido por “Kily” González ejerció presión sobre su rival cuando no tenía el balón, con Roldán como elemento libre, la hábil conducción de Zenón y una destacada labor de recuperación de Dómina, que bajaba al centro del campo para apoyar a los mediocampistas en la presión.
Por otro lado, San Lorenzo tuvo dificultades para avanzar en el campo rival, ya que Maroni estaba contenido y poco activo, lo que resultó en que los delanteros quedaran aislados en la parte superior. A pesar de que Unión se mostró más organizado en el campo, no logró amenazar a Batalla, quien solo tuvo que lidiar con un disparo al arco de Corvalán que salió desviado.
La única llegada del Ciclón se produjo en una jugada algo controvertida después de una falta en el mediocampo a Vera. Una contra de San Lorenzo continuó con un tiro débil de Maroni, y el balón fue controlado por Bareiro, quien, rodeado de defensores, logró girar y disparar para marcar un gol. A pesar de las protestas de los jugadores de Unión, San Lorenzo se puso en ventaja.
Antes del descanso, Dómina realizó una excelente jugada en el área, pero su disparo fue desviado por Hernández para un saque de esquina.
En la segunda mitad, Unión buscó igualar con determinación, aunque careció de creatividad y se encontró con la sólida defensa de San Lorenzo. El entrenador “Kily” González optó por el debutante Orsini, un delantero que recientemente jugó en Boca.
Fue en ese momento que Morales, en la única oportunidad clara que tuvo, marcó el gol del empate para Unión. La persistencia de Unión finalmente rindió frutos. Luego, se produjo la expulsión de Carlos Sánchez y un impresionante disparo al ángulo de Zenón que Batalla despejó de manera brillante. Con la tarjeta roja a Bareiro al final del partido, San Lorenzo se quedó con nueve jugadores pero logró mantener un valioso empate.
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