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El 1 de septiembre debía entrar en vigor la actualización del umbral para evitar el impuesto a los autos de lujo, pero no hubo ninguna comunicación del Gobierno al respecto. Esto ha generado incertidumbre entre fabricantes y concesionarios, ya que algunos han aplicado aumentos de precios por precaución, oscilando entre el 12% y el 40%, mientras que otros han optado por no vender nada y esperar noticias.
El trimestre anterior se mantuvo el límite de 8,4 millones de pesos para la exención del impuesto interno a los autos de lujo. Sin embargo, a partir del 1 de septiembre, se esperaba una actualización que, debido a la inflación oficial de mayo, junio y julio, podría rondar el 24%. No obstante, sumando el impuesto PAIS sobre bienes importados y la devaluación de la moneda, el aumento podría alcanzar aproximadamente el 35%.
La falta de publicación del nuevo umbral ha dejado a fabricantes y concesionarios en una situación de incertidumbre, ya que no pueden fijar precios ni realizar operaciones. Algunos concesionarios han vendido vehículos con precios oficiosos ajustados en torno al 13%, pero no tienen información oficial sobre cómo proceder a partir de ahora. La ausencia de claridad en este asunto ha generado frustración e indignación en el sector.
Se ha sugerido que el Gobierno podría estar retrasando la publicación del nuevo umbral para evitar un aumento significativo en los precios de los autos durante un mes crucial en la campaña electoral. Sin embargo, esto plantea un dilema, ya que si el límite sube significativamente, las marcas podrían aumentar los precios de la mayoría de los modelos que ya estaban cerca del umbral anterior, lo que llevaría a una falta de actualización de precios en los próximos meses. Por otro lado, si el umbral se mantiene bajo, la mayoría de los autos estarían sujetos al impuesto de lujo, distorsionando el propósito del impuesto.
Como posible solución, se ha planteado la creación de un programa similar a “Precios Cuidados” con valores que no superen los 9,5 millones de pesos para ciertos modelos, lo que podría hacer que el aumento de precios sea más tolerable en promedio. Este programa podría estar vinculado a acuerdos con el Gobierno, como la liberación de las unidades importadas que han estado retenidas en el puerto durante un tiempo prolongado. Las concesionarias, por su parte, están abiertas sin saber cómo proceder y esperan recibir información a lo largo del día. Algunas podrían optar por fijar precios elevados por precaución, mientras que otras podrían mantener su mercadería sin vender hasta obtener claridad sobre los nuevos umbrales.
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