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Las elecciones de este domingo están programadas para marcar un punto de cambio significativo en el Congreso de Argentina. Basándose en los resultados de las PASO y en encuestas recientes, se prevé un cambio drástico en la dinámica política en el Senado y la Cámara de Diputados, debido a la fragmentación política y la falta de mayorías automáticas.
Los legisladores libertarios, liderados por Javier Milei, desempeñarán un papel destacado, incluso si Milei no gana la presidencia. Si los resultados de las PASO se repiten, donde La Libertad Avanza (LLA) obtuvo el 30% de los votos, el bloque libertario tendrá 41 escaños en Diputados y 8 en el Senado. Sin embargo, algunas encuestas sugieren que Milei podría superar el 40%, ganando en primera vuelta, lo que aumentaría aún más el número de bancadas.
En la Cámara de Diputados, Unión por la Patria (UxC) debe renovar 68 de sus 118 escaños. Si el oficialismo no mejora sus resultados de las primarias, su bancada se reducirá a aproximadamente 95 escaños, perdiendo su condición de primera minoría. Aunque Juntos por el Cambio también perdería representación, mantendría una posición relativa más sólida, pasando de 117 a 108 bancas.
El quórum requerido para abrir una sesión es de 129 diputados, lo que significa que los tres principales bloques tendrán que negociar si desean aprobar proyectos de ley.
Hasta ahora, los interbloques Federal y Provincias Unidas han actuado como “árbitros” durante los últimos dos años, pudiendo inclinar la balanza en favor del oficialismo o la oposición en cuestiones importantes. Sin embargo, a partir del 10 de diciembre, su influencia disminuirá, y La Libertad Avanza podría convertirse en la nueva garantía de la mayoría.
Patricia Bullrich ya ha expresado su interés en negociar con los libertarios si llega a la presidencia, lo que podría permitir que ambas bancadas alcancen el quórum sin necesidad de consensuar con otros bloques más pequeños.
Por otro lado, si Milei llega a la presidencia, enfrentaría dificultades en el Congreso, ya que incluso con una victoria en primera vuelta, los libertarios quedarían lejos del quórum. En este escenario, el rol de Mauricio Macri podría ser fundamental. No obstante, los libertarios también consideran la posibilidad de sumar apoyo dentro del peronismo no kirchnerista a través de los gobernadores.
Si no se llega a un acuerdo con JxC o el peronismo, existe el riesgo de un conflicto institucional, ya que Milei se vería obligado a gobernar por decreto. Sin embargo, hay cuestiones que no pueden resolverse mediante decretos y el Congreso podría derogarlos si cuenta con una mayoría en ambas cámaras.
Sergio Massa, por su parte, podría enfrentar dificultades para avanzar con su agenda legislativa si gana este domingo, ya que necesita alcanzar el 45% de los votos para no perder escaños, un escenario que no se contempla en ninguna encuesta. En resumen, una alianza en su contra de los libertarios y JxC podría bloquear la Cámara de Diputados.
El panorama político también cambiará en el Senado, donde el kirchnerismo pudo alcanzar la mayoría en los últimos años gracias a los bloques provinciales. En las PASO, Milei se impuso en tres de las ocho provincias donde se eligen representantes, y por lo tanto, podría cambiar la dinámica en el Senado.
El resultado de las elecciones definirá las relaciones de poder dentro del Congreso, y el escrutinio definitivo será clave debido a la incertidumbre y la cantidad de votantes indecisos.
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