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El enfrentamiento del domingo entre Independiente y Banfield no podía concluir de otra manera que con un empate, reflejando lo parecido de sus desempeños a lo largo del año. Ambos equipos tuvieron un primer semestre complicado, donde también empataron sin goles. Iniciaron la Copa con el objetivo de evitar el descenso y, tras una destacada campaña, ahora buscan clasificarse a los cuartos de final. Con 23 puntos, Independiente está cerca de lograrlo, mientras que Banfield, con 20 puntos y ocho juegos invicto, por ahora se queda fuera por diferencia de gol. En la última fecha, Independiente enfrentará a Talleres y Banfield será local contra Gimnasia.
El equipo de Tevez destacó por ser una “máquina de tirar centros”, principalmente desde la banda derecha con el incansable Mauricio Isla. Sin embargo, estos centros generaron más protestas por posibles penales que nunca se materializaron, mostrando la dificultad para encontrar el gol en Avellaneda.
La estrategia de Independiente de centrarse en los centros se debió a imprecisiones en los pases cortos y a la disposición de Banfield, que cerró líneas y se paró de manera compacta. A pesar de la clara intención de asegurar un punto, Banfield tuvo la oportunidad de llevarse una victoria inmerecida en el segundo tiempo, pero el arquero Rodrigo Rey demostró su imbatibilidad una vez más, sumando su sexta valla invicta en los últimos ocho partidos.
Kevin López, el volante central de Independiente, se destacó al intentar clarificar los caminos en una zona que parecía destinada a la intrascendencia.
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